La Cuarentena debe ser lo más corta posible para evitar problemas de salud.

Dr Walter Sepúlveda Loyola, MsSc, PhD (c)

El distanciamiento social ha sido la principal estrategia para evitar la propagación del virus a nivel mundial. Lo cual ha sido implementado en todos los países, siendo recomendado por la Organización mundial de la Salud. Sin embargo, en algunos países, debido a su mal manejo de la pandemia han tenido que prolongar demasiado el periodo en aislamiento social, especialmente en los adultos mayores, que son el principal grupo de riesgo que han presentado tasa de mortalidad por sobre el 80% en países europeos. A pesar del beneficio que tiene el aislamiento social para disminuir la velocidad de expansión del virus, el aislamiento total puede generar efectos negativos para la salud, que muchas autoridades y expertos del área no han analizado en profundidad.

Existen tres situaciones en la literatura sobre el tipo de aislamiento social: aislamiento total, parcial y sin aislamiento. En nuestros estudios realizados con nuestro grupo de investigadores de Brasil y España hemos observado que aquellos individuos que están en aislamiento total presentan altos índices de depresión y ansiedad comparado con aquellos que no están en aislamiento. De la misma forma, aquellas personas que reciben un salario igual o menor al salario minino presentan mayores complicaciones en la salud mental que aquellas que tienen un salario estable y mayor a 2 salarios mínimos.  Dentro de los principales síntomas para la salud mental, está la aparición de trastornos del sueño, ansiedad, depresión, desorientaciones, delirio y problemas de memoria. Lo que claramente va a generar un impacto mayor en quienes ya tienen uno de estos problemas o patologías relacionadas con problemas de memoria como Alzheimer y demencia senil.

¿El impacto es solamente relacionado con la salud mental? La verdad es que NO.  Los últimos estudios observados en población española y francesa han reportado una disminución significativa del nivel de actividad física en toda la población que podría afectar considerablemente a los adultos mayores. No todas las personas han mantenido un adecuado nivel actividad física durante la cuarentena y el sedentarismo ha aumentado exponencialmente especialmente en aquellos que son ejercicio-dependientes.  Recordemos que hay muchas enfermedades que necesitan atención de kinesiólogos frecuentemente, como por ejemplo enfermedades pulmonares, cardíacas, neurológicas y musculo esqueléticas. Donde el rol del ejercicio física para evitar complicaciones y mantener la funcionalidad es fundamental.

Por eso que el tiempo de la cuarentena debe ser lo más corto posible y dejar el aislamiento total solo para los grupos de riesgo. Teniendo en consideración que aquellos individuos que están en este tipo de aislamiento deben tener un programa con estimulación cognitiva y ejercicio físico en casa. Cómo experto en el área, les recomiendo para las personas que están en aislamiento:  1) hacer ejercicio de diferentes modalidades en casa (aeróbico, fuerza, coordinación, flexibilidad y equilibrio) 2)actividades cognitivas (juegos de memoria, sopas de letra y juegos de mesa) 3) mantener contacto con los familiares idealmente diariamente (especialmente para aquellos que viven solos) 4) hacer actividades de recreación en casas utilizado la tecnología o vídeos por el internet y  5) evitar al máximo la sobreexposición a noticias de los medios de comunicación. Para las autoridades es recomendado: 1) habilitar el uso de tecnologías para llevar a cabo programas de tele salud o tele rehabilitación para los profesionales tener contacto con los pacientes; 2) capacitar a los profesionales sobre el uso de tecnologías; 3) entregar información simple y fácil de entender para todos al respecto de las medidas de aislamiento y tasa d contagio; 4) habilitar plataformas online gratuitas con estrategias para la salud física y mental; 5) actuar adecuadamente para mantener el aislamiento social por el periodo más corto posible; 6) mantener un apoyo económico en aquellos que reciben una ingreso mensual igual o menor un salario mínimo.   De esta manera podremos disminuir los efectos que está generando la cuarentena para la salud mental y física de las personas y evitar complicaciones futuras: como la prevalencia de mas enfermedades, discapacidad y mayores gastos para el sistema de salud.